Testimonio de Facundo Díaz

Mi nombre es Facundo Díaz, tengo 19 años y soy de Güemes.

Desde siempre me gustó entender el “”por qué”” de las cosas. Cuando descubrí que podía estudiar Ciencias Químicas en la UNC, supe que era lo mío. Pero a medida que leía sobre el examen de ingreso, la realidad me golpeó: era mucho más difícil de lo que pensaba, y no me sentía listo.

Viniendo de un colegio privado, pensé que tenía ventaja, pero pronto me di cuenta de que había huecos importantes en Matemática y Física. Las funciones eran una pesadilla, y la dinámica en Física me parecía imposible de entender. Sumale a eso el miedo a desaprobar el cursillo de enero, que es obligatorio, y ya te imaginás cómo estaba.

Un día encontré el blog de Apoyo Total Universitario y los cantacté. Me anoté al curso intensivo y no me arrepiento. Las clases eran dinámicas y los profes tenían una forma clara y directa de explicar que hacía todo más llevadero.

Lo que más me ayudó fueron los simulacros. Eran idénticos a los del ingreso oficial: mismos temas, mismos tiempos. Gracias a eso, me familiaricé con el formato del examen y aprendí a gestionar mejor mis tiempos y mi ansiedad. Además, cada error era una oportunidad para reforzar lo aprendido.

En especial, destaco al profe de Física. Explicaba con tanta pasión que los temas más densos empezaban a tener sentido. Gracias a él, temas como circuitos o leyes del movimiento dejaron de asustarme.

Otra cosa que valoro mucho fue el clima en el aula. Al ser grupos chicos, todos participábamos. Te sentías cómodo para preguntar lo que fuera, sin miedo al “”qué dirán””. Eso hizo que no me sintiera solo en el proceso y me mantuvo motivado.

Conforme se acercaba la fecha del examen, intensificamos el ritmo. Hacíamos simulacros largos, con cuatro horas de duración, como en la UNC. Esa práctica me preparó tanto en lo académico como en la parte mental.

El día del examen, sentí que estaba listo. Había preguntas que me sonaban familiares, lo que me dio seguridad. Usé la estrategia de empezar por lo que sabía, y funcionó. Cuando vi mi nombre en la lista de ingresantes, fue un momento inolvidable.

Si estás pensando en estudiar Ciencias Químicas y sentís que te falta base, te lo digo en serio: Apoyo Total hace la diferencia. Con su guía, el camino es más claro y el objetivo, alcanzable.